Aquí es donde entra nuestro trío de protagonistas. Yato,
un dios muy poco conocido, y que por tanto no tiene un templo y básicamente, esta
será su motivación durante toda la trama. Luego está Yukine, un chaval de unos
14 años que se ha convertido en el tesoro sagrado de Yato, un personaje que ha
sufrido mucho durante su anterior vida. Y por último, está Iki Hiyori, una
chica normal que se ve arrastrada a este mundo por un accidente por culpa de
Yato, y es con este acontecimiento con el que parte el primer episodio, junto a
la dimisión del anterior tesoro sagrado de Yato.
Sin embargo, la calidad de los personajes en Noragami es
irregular. Habiendo algunos con una gran profundidad, como es el caso de Yato y
Yukine, con un pasado mínimamente interesante y una evolución de personaje
constante, otros, en cambio, carecen de ella, como es el caso de Iki Hiyori, que
es un personaje unidimensional, cuyo único propósito es servir de entrada al
mundo que se nos presenta, aparte del interés romántico para el
protagonista. Y hay otros que
simplemente están ahí y aportan poco a la trama.
Con dos temporadas animadas y cada una de ellas diferenciada,
claramente, por dos arcos[2], en
mi opinión, la mejor la del primer arco de la segunda temporada. Que me parece
bastante interesante, ya que se disipan algunas dudas del pasado de Yato. Y el
peor, el segundo arco de la primera temporada, que cae en el tópico de la
damisela en apuros. Sin embargo, el final de la serie es abierto, y la única forma
de concluir con la historia sería adquirir el material original, cosa que
entiendo que eche atrás a algunos. Aunque en lo personal pienso que la serie
sigue siendo de igual de disfrutable, y en mi caso particular, no me arruino la
experiencia.
Aun teniendo quejas con algunas partes del guion, con el
tratamiento de ciertos personajes y con su sentido del humor, -el cual en
ocasiones me llegaba a parecer insoportable-, recomiendo esta serie, pues su
planteamiento me parece muy interesante, con una animación
correcta, un estilo visual muy llamativo, algunas piezas de la OST[3] muy buenas y con una capacidad de magnetismo
espectacular, siempre que te dejes llevar. No es una obra excepcional, como
algunos auguraban, pero tampoco es ni mediocre ni horrenda, como otros afirman.
No hay comentarios:
Publicar un comentario