Como cada año, en el colegio Lobo, la decoración navideña espera a salir del armario para lucir, con todo su esplendor, en cada uno de los rincones de nuestro colegio. Unas semanas antes de las vacaciones de Navidad, comenzamos a decorar el colegio. Las niñas colaboran en esta tarea con entusiasmo, colocan los arbolitos con las luces, el espumillón y las guirnaldas y decoran las puertas de sus habitaciones. Les encanta y lo viven con mucha ilusión.
Desde ese mismo instante, nos ponemos a organizar el sorteo del tan esperado “Amigo Invisible”, en nuestro caso, “Amiga Invisible”. Por supuesto, todo tiene que quedar en secreto, nadie puede decir quién es su amiga invisible, bueno, eso es lo que tiene que ser pero... “oye, ¿quién te ha tocado? “
Todo está dispuesto para celebrar nuestra gran noche, los regalos colocados alrededor del árbol y todas allí reunidas, esperan a que les llegue el turno de recibir, no sólo un regalo, sino también un abrazo y una sonrisa de nuestra amiga visible. Esta noche no sólo se abren regalos sino también nuestros corazones. En el colegio se respira un ambiente de amor, humor, alegría, compañerismo y felicidad.
A su vez, celebramos la Gala de los Lobos de Oro. Al igual que el amigo invisible, los otorgamos en la misma noche, en la que las alumnas pasean por nuestra alfombra roja, con sus máscaras lobeznas y reciben su tan esperado premio.
Lamentablemente, este año no ha sido posible hacerlo así por las circunstancias especiales que nos está tocando vivir. Pero como no nos queríamos rendir y apagar la ilusión de nuestras niñas, hemos decidido organizarlo de otra manera y entregarlo de otro modo. En cualquier caso, a veces, lo importante es la intención de lo que se hace y no sólo cómo se hace.
Lo mismo ha ocurrido con los Lobos de Oro, tuvimos que optar por entregarlos del mismo modo a las tres categorías que seleccionamos: Lobo de Oro a la mejor estudiante, a la que se le premia el esfuerzo, trabajo y tesón: Natalia Sánchez. Lobo de Oro a la mejor habitación, donde se premia el orden y aseo de su habitación y pertenencias : Vanessa Fernández y por último Lobo de Oro a la mejor compañera, que deciden por votación todas las niñas: Lucía Agulló.
Pero de entre todos los motivos y actos navideños, hay uno que también es muy especial. Se trata de nuestro arbolito CHOOSE KIND, el árbol de la AMABILIDAD Y el AGRADECIMIENTO, con el que queremos promulgar la solidaridad, la generosidad, la empatía, la educación y las buenas maneras, algo que tiene bastante que ver con nuestro trabajo de educadoras. Pretendemos con esto hacer conscientes a las niñas de la importancia que tiene el respeto y la educación para convivir en sociedad y promovemos e incentivamos la amabilidad con los demás a través de acciones como dar siempre las gracias, ser respetuosas, ser amables y solidarias, apoyar a l@s compañer@s que lo necesitan, decir palabras de aliento a quien está triste, especialmente en estos momentos difíciles para muchos, pero sobre todo, ser AGRADECID@S.
Celebración del amigo invisible
De este modo, nuestro arbolito luce cartelitos con propuestas en inglés como: Say thank you , give someone a compliment, look for the best qualities in the people you know, stick up for a friend who is being mistreated, listen to someone who has a bad day….
Las niñas se comprometen, al menos, a realizar alguna de las acciones propuestas, es más, también las representan en el colegio.
Esperemos que mejoren estos tiempos en los que estamos viviendo y podamos volver a la “normalidad”, disfrutar más y mejor de nuestras actividades, poder reunirnos como cada año y continuar fomentando la educación con nuestr@s chic@s.
Os deseamos unas Felices Fiestas con salud.
CHOOSE KIND, MY FRIEND.
COLEGIO LOBO
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